Durante el sexo, hombres y mujeres pasan por diferentes fases de excitación. Cada persona vive estas fases de distinta manera y, en una misma persona, la duración e intensidad de cada fase tampoco son siempre iguales. Las fases son:
Deseo
Cuando alguien siente deseo sexual tiene ganas de mantener relaciones sexuales, de tocar a su compañero o compañera y ser tocado por este, o de tocarse a sí mismo.
Excitación
Los tocamientos propios o de su compañero o compañera pueden causar excitación sexual. En ese caso, su cuerpo y el de la otra persona experimentan las siguientes reacciones.
- La vagina se humedece más (en las mujeres).
- Los labios vaginales se hinchan (en las mujeres).
- Los cuerpos cavernosos del clítoris se llenan de sangre (en las mujeres), lo que hace que el clítoris aumente de tamaño, se levante hacia arriba y se vuelva muy sensible.
- Los pezones se endurecen (en las mujeres).
- Los cuerpos cavernosos del pene se llenan de sangre (en los hombres), lo que hace que el pene se endurezca, aumente de tamaño y se levante hacia arriba: es lo que se conoce como erección.
- Pueden salir del pene algunas gotas de líquido (en los hombres).
- El corazón late más deprisa (tanto en los hombres como en las mujeres).
Además, experimenta usted sentimientos sexuales hacia su compañero o compañera o imagina fantasías sexuales.
Su excitación va en aumento. Es una sensación muy intensa y agradable.
Orgasmo
El orgasmo es una descarga de energía sexual en su organismo:
- Los músculos del suelo pélvico se contraen.
- Generalmente, cuando un hombre tiene un orgasmo también eyacula, es decir, expulsa semen por el pene.
- Algunas mujeres también expulsan un poco de líquido por la vagina durante el orgasmo. Es lo que se conoce como eyaculación femenina.
Relajación
Tras el orgasmo, la excitación disminuye poco a poco y el cuerpo se relaja de nuevo. A veces puede aparecer cierta sensación de cansancio.