Los órganos sexuales externos (esto es, visibles) de la mujer también se llaman genitales femeninos o vulva. Están formados por:
- los labios vaginales externos o mayores
- los labios vaginales internos o menores
- la entrada de la vagina
- el clítoris
El orificio de la uretra (o meato urinario) y el ano no forman parte de los órganos sexuales.
En cada mujer, la vulva tiene un aspecto distinto. Su aspecto no es importante para su función.
Labios vaginales y entrada de la vagina
Los labios vaginales son unos pliegues de la piel que recuerdan por su forma a los labios de la boca. Protegen la vagina, el clítoris y el orificio de la uretra.
La mujer tiene dos pares de labios vaginales:
- Labios vaginales externos, o mayores: suelen estar cubiertos de vello y son más gruesos que los labios internos.
- Labios vaginales internos, o menores: no están cubiertos de vello y son más finos que los externos, aunque no siempre más pequeños.
Clítoris
El clítoris es un órgano muy sensible situado por encima del orificio de la uretra, en la zona del monte de Venus, donde se unen los labios vaginales internos.
La parte visible del clítoris suele tener un tamaño similar al de un guisante (arveja o chícharo). Sin embargo, a veces es más pequeño o más grande. El clítoris tiene dos ramas relativamente largas que se adentran en el interior del cuerpo. Son los llamados cuerpos cavernosos: aunque no pueden verse por estar debajo de la piel, son la parte más grande del clítoris y llegan hasta los labios vaginales externos.
El clítoris es el principal órgano para la excitación sexual de las mujeres. En muchas mujeres, tocarlo o acariciarlo las lleva al orgasmo.
En algunos países de África y Asia se corta el clítoris de las niñas y las mujeres. Esto se conoce como mutilación genital femenina, y está prohibida en Alemania y en el resto de Europa.
En algunos países de África y Asia se corta el clítoris de las niñas y las mujeres. Esto se conoce como mutilación genital femenina, y está prohibida en Alemania y en el resto de Europa.